Michael encuentra patrones en los datos de ip.
Pero en un principio no estaba destinado a esto. Al principio, iba para fabricante de velas náuticas. Y debía usar las manos. Pero en el camino, su profesor de matemáticas le dijo que fuera a un instituto técnico, un camino que no había considerado. Aun así, fue. Y allí fue donde un ordenador le cambió la vida. Un subidón instantáneo. Y amor a primera vista.
En la actualidad, Michael es desarrollador de software sénior. Es el cofundador. Pionero desde el principio, desempeñó un papel fundamental en la creación de XCI. Como tal, comprende la euforia de perseguir una idea prometedora. Mientras otros se limitan a soñar, él se lanza a la piscina. Y pone todo a prueba. Lo bueno. Lo malo. Lo aparentemente imposible. Pero no se amilana. De hecho, esto le inspira.